Caso de éxito exportador: Chupa Chups
El empresario catalán Enric Berna ideó a finales de los años 50 el primer caramelo con palo, para que los niños no se ensuciaran al comerlo. Como muchas empresas comenzó con un producto de calidad enfocado al mercado nacional, pero con un marketing y una distribución muy cuidada. En nuestro blog hablamos de un ejemplo de caso de éxito exportador.
En poco tiempo, los Chupa Chups se hicieron muy populares entre el público infantil español y la empresa decidió iniciar su internacionalización: Estados Unidos, Alemania, Reino Unido y así hasta llegar a Japón. Hoy en día las ventas fuera de nuestras fronteras suponen el 90% de sus ingresos y está presente en 170 países.
Empresa de traducción para exportar
Para el equipo humano que aporta Chupa Chups es fundamental conocer la cultura y lengua del país en el que se van a implantar o bien apoyarse en traductores profesionales que les garanticen un dominio de la lengua sus costumbres del país, algo fundamental a la hora de hacer negocios y asentarse en países extranjeros.
Los responsables de Chupa Chups aplican una estrategia que consiste en diseñar unas grandes líneas estratégicas que se implantarán en todos los países, aunque las concreciones de las mismas se determinan en función de los gustos, las costumbres e idioma locales de cada mercado, mostrando un claro compromiso con los valores más acentuados de cada sociedad.
La empresa el los últimos años lleva a cabo un proceso de franquicia, donde la producción se empieza a realizar en los países de destino. Así Chupa Chups incorpora la maquinaria, marca, marketing y distribución, mientras que la empresa local el edificio y gran parte de los empleados. Es lo que se denomina joint-ventures.
Chupa Chups ejemplo de caso de éxito
Chupa Chups ha demostrado una gran capacidad para reconocer mercados emergentes y convertir amenazas como el descenso de la natalidad, en oportunidades incorporando al adulto en el mercado de los caramelos y poniendo a la venta nuevos productos (Smint y Crazy Planet).
Su política de marketing con arriesgadas campañas de publicidad, ha contribuido al éxito internacional de esta empresa nacional de caramelos con palo. Este punto es fundamental hoy en día, puesto que muchas empresas se niegan al cambio y crean estructuras con sistemas organizativos obsoletos, que pierden eficacia y están abocados al fracaso.
El éxito de Chupa Chups ha sido su estrategia de internacionalización, que cuenta con ventajas respecto a sus competidores. En primer lugar, tienen un innovador sistema de distribución, con una distribución masiva y de autoventa.
A su vez, su imagen de marca, diseñada por Salvador Dalí, es conocida en todo el mundo. El logotipo de la margarita amarilla simbolizó, y simboliza aún hoy en día, vanguardia. La tarifa cobrada en su día por el genio catalán fué millonaria, pero mereció la pena. Dicen que el trabajo desarrollado por Dalí no fué más allá de una hora de duración pero desarrolló los conceptos básicos de imagen que hoy conservamos: la colocación del logotipo en la parte superior del producto, la flor rodeando el texto, el color amarillo, etc. Todo un Caso de éxito exportador: Chupa Chups