Todos nos emocionamos. Para bien o para mal, todos sabemos lo que es reír, alegrarnos, expresar amor, tristeza, dolor o desesperación. Cuando viajamos o nos encontramos con alguien de un país extranjero, es sencillo reconocer sus emociones aunque no conozcamos su idioma. Sin embargo, no siempre es tan sencillo comprender si una persona está enfadada o contenta cuando habla con nosotros en otro idioma. Hoy veremos como afectan los idiomas a las emociones.
¿Cómo funcionan las emociones?
Las emociones son muy cambiantes. Depende de quién las experimente, pueden afectarse en cadena y producir nuevas sensaciones en esa persona. A veces, escuchar o pronunciar palabras lleva a notar una emoción. Sucede con vocablos de algunos idiomas. La gente puede llegar a utilizar ese léxico que conoce para generar en sí misma cierta emoción buscada, como la alegría o la tristeza. Está claro que en cuestiones de emociones, no hay nada definitivo. Cualquier idioma puede despertar en una persona algo diferente.
¿Cuál es el alcance de una emoción?
Igual que se conocen familias lingüísticas, también hay diferentes ramas familiares para interpretar las emociones. Por norma habitual, se habla de tres grandes grupos de emociones. Por un lado, las universales. Estas permanecen en menor o mayor medida conectadas entre todas las culturas del mundo. En segundo lugar, está la familia de lenguas austronesias, que dividen las conexiones de forma más drástica entre las diferentes zonas. Por último, la familia indoeuropea, que segrega incluso más las emociones dependiendo de la procedencia de las personas que las generan.
¿Cómo puede afectar el sonido de la voz a una emoción?
Todas las sensaciones interfieren con todos los sentidos. Por eso, el sonido de la voz o el tono de la misma puede hacer que la apreciación del oyente sea diferente y, en consecuencia, la interpretación o sensación se convierta en una experiencia diversa a respecto de la intención del hablante o de la recepción de otro oyente. Sin embargo, por norma general, las voces y los resultados de sus pronunciaciones tienen consecuencias esperadas. Corresponden con algo semejante a lo siguiente:
- Alegría: siempre es manifestada en voz alta y con palabras que se pronuncian rápido.
- Tristeza: normalmente, se utiliza un tono grave para demostrar tristeza y se habla más lento de lo habitual.
- Cariño: el amor se describe o manifiesta con tonos altos e inflexiones suaves, con una cadencia y tiempo medio.
- Miedo: se suele presentar con tonos bajos y con palabras que se pronuncian lento.
- Sorpresa: suele manifestarse en tono alto, que varía de intensidad, pero que no produce un habla rápida, sino más bien pausada.
- Cólera: los tonos altos son los que le corresponden a este sentimiento, que además utiliza inflexiones para manifestarse y un ritmo fuerte y rápido.
- Orgullo: las voces agudas son las elegidas para demostrar esta sensación, que además se acompañan de intensidad fuerte y de una velocidad reposada.
- Sobrecogimiento: son los tonos graves, monótonos y lentos los que llevan a imaginar esta sensación.
¿Qué efecto tienen los idiomas en la emoción?
Cada lengua o idioma tiene una forma de hablar diferente que corresponde a la generalidad de su realización. Además, cada hablante cuenta también con una entonación diferenciada que puede volver a la voz más o menos atractiva. En general, las lenguas con sonidos guturales no se entienden como un idioma que refleja amor, a no ser que se entienda lo que se está diciendo. Sin embargo, las lenguas más amorosas o con curvas melódicas suaves reflejan amor, a pesar de que estén insultando a la persona que tengan delante.
Puede comprobarse cómo un idioma afecta a las personas que lo escuchan cuando se comprueba si gusta o no una palabra en otro idioma que no se comprende. Cuando no se comprende el mensaje, la simple asimilación de las sensaciones de los sonidos son las que permiten generar una sensación. Las emociones son iguales: irracionales, y no tienen que responder necesariamente a algo que concuerde con la realidad (o, en este caso, con lo que se dice). Las entonaciones planas no son atractivas, pero las musicales sí.
Idiomas y culturas
Como hemos visto en el blog de nuestra agencia de traducción en multitud de ocasiones, cada idioma cuenta con sus propios matices y particularidades que provocan que una misma palabra o emoción parezca tan distinta. Una correcta traducción profesional al croata sabrá adaptar el texto y lo que busca transmitir aunque el idioma original sea uno tan distinto como el japonés. Lo mismo ocurre cuando hablamos de realizar traducciones simples ocurre exactamente lo mismo.
No hace falta irse tan lejos para ver cómo la comunicación cambia totalmente de una frontera a otra. En Europa existen varios idiomas con millones de hablantes en cada uno de ellos y en todos los casos se expresan de manera diferente. Es maravilloso.
Traductora profesional y Gerente de Online Traductores desde hace más de 13 años. Trabajo para lograr que las empresas puedan internacionalizarse sin barreras ni obstáculos idiomáticos.